Cómo elegir a un buen terapeuta.
¿Cómo elegir un buen terapeuta?
Estamos en una época en la que todo es confuso, en donde reina el caos y descontrol y la espiritualidad no es un tema ajeno a estos tiempos convulsos. Si necesitas terapia, ¿Cómo elegir a un buen terapeuta?
Todos en algún momento de nuestras vidas necesitamos una guía, pero no unas cadenas que nos anclen y nos hagan dependientes de alguien para poder pensar y actuar.
Tenemos que ejercer nuestro derecho a la libertad y autonomía en todas sus facetas. Si no, nunca vamos a conocer la verdadera cara del poder personal que se basa justamente en la sabiduría interior y en la ejecución de acciones que se manifiestan cuando ejercemos ese derecho.
Es un derecho divino que reside dentro de nuestra consciencia. No pertenece a nadie más que a uno mismo.
Me gustaría que cada persona que esté leyendo estas líneas, si necesita ayuda, pueda ponerse en manos de un terapeuta sincero e impecable. y que por sobre todas las cosas, hable con pruebas de lo que dice.
Hoy una amiga me comentaba un caso que he vivido muchas veces en la consulta. Cuando viene alguien a verme y me cuenta su experiencia con otro terapeuta que solamente le infunde miedo, sugestión y somatización tras contarle historias incoherentes sobre el tema que consulta.
“Terapeutas” que solamente se dedican a asustar, a decir cosas sin sentido y sin pruebas. Si vas a un terapeuta y te dice cosas pídele pruebas, nombres, situaciones que solamente tu conozcas y que te pueda relatar y que validen lo que te está diciendo, porque hay muchos “profesionales” que se dejan obnubilar por su propio ego y terminan creyéndose las cosas que repiten a los consultantes sin ningún sentido y fundamento.
Aprende a discernir
Sospecha de todo aquel que te infunda miedo porque leer la energía es viajar hacia donde reside el alma de esa persona y eso nunca puede hacer sentir miedo a alguien. Al contrario.
Un buen terapeuta transmite su sabiduría desde la empatía, la compasión, las alternativas y sobre todo desde la verdad. A veces la verdad es sencilla, simple y sin tantos firuletes como aquellos que dicen “verdades” grandilocuentes, pero sin lógica alguna, sólo para satisfacer su propio ego y sentirse distintos al resto de los mortales.
Si vas a ponerte en manos de un profesional, lee sobre él, recorre sus redes sociales, lee sobre su trabajo y siempre déjate guiar por tu intuición, porque ella no te va a dejar desamparado.
Déjate guiar por esa sabiduría interior que todos tenemos y haz la elección desde tu versión amorosa y sabia. Nunca desde la duda o el miedo.
La falsa New Age
El mundo espiritual está lleno de falsas verdades, como todas las áreas de la vida. Quienes ejercen la labor sin escrúpulos se amparan ante la imposibilidad de probar lo que dicen porque nada más abstracto que la energía, pero siempre hay pruebas que se manifiestan cuando uno habla desde la verdad y desde la sabiduría.
Se nota quienes son asistidos, quienes tienen un equipo detrás que los avala y quienes trabajan continuamente su propio ser en beneficio de sí mismo y de quienes se cruzan en su camino.
Si vas a elegir un terapeuta, mírale la vida. Simplemente eso. Mira cómo es, cómo vive, Cuánta coherencia hay en su vida, cuánto profesa lo que habla.
Elige un terapeuta que ya haya sanado su sufrimiento más grueso, que tenga equilibrio en su pasado, que se haya podido perdonar tras todas sus equivocaciones y que haya abierto sus dones, porque ahí reside su verdadera capacidad de ayuda.
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